Cuando
Carlos III llegó a España para ser su rey, trajo consigo muchas de las modas
italianas tan en boga en su reino. Se comenzaron a popularizar los belenes,
ya conocidos en España, introducidos por los franciscanos, y se implantó la
lotería. Fue el marqués de Esquilache, quien, ante las necesidades de la
Hacienda Pública, como ministro del ramo, hizo posible la celebración del
primer sorteo.
Pero
no fue hasta el siglo siguiente, durante la Guerra de la Independencia, cuando
aquella lotería tomó el nombre de Nacional. Luego, terminada la guerra, con
Fernando VII, cambió su nombre por el de Moderna, para recuperar después de
nuevo el de Nacional durante el trienio liberal, y otra vez ser Moderna con el
regreso del absolutista Fernando. Quién sabe de las razones de dichos cambios
en el nombre del juego, pero quizás pensara el rey felón que no convenía
llamarla nacional, por pertenecer así a toda la nación; y sí moderna, porque
sintiéndose él un rey moderno, una lotería con dicho nombre podría ser más suya
que la otra de obligatorio reparto. Al menos así se podría entender leyendo el
artículo publicado por don Ángel Fernández de los Ríos en el que relató cómo
Fernando VII era muy frecuentemente agraciado por la “buena suerte” en los
sorteos de la lotería. Y es que al parecer, en connivencia con Tadeo Calomarde,
a la sazón ministro de Hacienda, cuando algún premio importante recaía sobre un
número no vendido y devuelto por el lotero, acababa siendo cobrado por el rey,
quien moderno que era él, se maravillaba de su buena fortuna.
Con
esta corta historieta, próximo ya el sorteo de Navidad, preludio de las fiestas
navideñas, quiero desear a todos unas felices
fiestas y que la diosa Fortuna sea pródiga con los seguidores, lectores y
amigos de este blog.
Para que luego digan del señor Esquilache. Ideas tenía, otra cosa es que cayeran bien al personal.
ResponderEliminarMuchas gracias por esos buenos deseos y que la diosa Fortuna nos sea propicia.
Felices fiestas.
Otra historia que no conocía. Leyendo sus entradas digo lo de aquel Griego “solo se que no se nada”
ResponderEliminarOjalá se cumplan sus deseos y la suerte llegue allí donde mas la necesiten.
Felices Fiestas y un abrazo.
Cucha tú qué listo el rey, ni que fuera un Fabra más.
ResponderEliminarBueno, ya fuera de bromas, te deseo unas felicísimas fiestas y que, a poder ser, te toque la lotería.
Un abrazo Dlt.
Ojalá la suerte llegue para todos en la forma que lo necesiten. Más que suerte, éxito.
ResponderEliminarSaludos Marques. Que todo vaya bien
Lo de Fernando VII es que no tiene nombre, qué barbaridad.
ResponderEliminarMucha suerte, monsieur. A ver si sale ese número y se lleva una alegría.
Buenas noches
Bisous
¡Joder! Así también juego yo. Feliz Navidad desde mi mejana
ResponderEliminar¡Lo que me faltaba conocer del más nefasto de todos los reyes que hemos tenido!
ResponderEliminarUn abrazo.
Jajajaja, osea que Fabra no ha inventado nada :D Igual lo de así se las ponían a Fernando VII tiene más de un significado
ResponderEliminarMuchas felicidades para ti y tu familia y muchas gracias por tu presencia siempre. Un abrazo enorme.
¡Ay, cuántas "virtudes" más nos quedarán por descubrir del gran Fernando!
ResponderEliminarMe va a quedar un comentario muy largo, pero voy a copiar un fragmento que, creo, retrata muy bien cierta visión de la lotería:
""—Pues... si yo tengo mil dólares y los invierto en unos billetes de lotería, lo más probable es que los pierda. El cálculo de probabilidades va en mi contra en una proporción de veintinueve mil novecientos noventa y nueve contra uno a favor.
César de Echagüe cerró los ojos como si oyese un chirrido irresistible.
—¡Señor Dolin! ¡Por favor! ¿Es posible qua no le parezca un crimen espantoso convertir el azar en ciencia exacta?
—Al fin y al cabo es una ciencia casi exacta.
—Desde luego. De treinta mil partes, sólo una es azar. Las restantes son exactas. Usted sabe de antemano que veintinueve mil novecientos noventa y nueve números no saldrán premiados.
—Eso es —asintió Dolin—. Una minúscula parte a favor frente a una gigantesca masa en contra. El peso de la realidad se impone. Es mejor guardar los mil dólares en el Banco, irles agregando diez, veinte, cien o quinientos de cuando en cuando y el día en que se tenga lo suficiente, sacar el dinero y construir una casa, una industria. Algo.
[...]
—¿La ofrece mejores posibilidades la lotería? —preguntó Dolin, riendo la gráfica exposición del hijo del hacendado.
—Ya lo creo. ¡Pero infinitamente mejores! Yo tengo un billete de la lotería. Puedo ganar medio millón de pesos. Tengo tantas probabilidades a favor y en contra como el resto de los jugadores, o sea que tengo un cincuenta por ciento a mi favor.
—Según como cuente, porque...
—No me destruya las ilusiones —pidió César—. Faltan muchos días para que el alcalde haga girar el bombo y saque el número premiado. Sin embargo, yo imagino la escena. El número que ha sacado es el mío. ¡Soy rico! Tengo medio millón de pesos al segundo y medio de haber comprado el billete. ¿Qué hago? ¿Construyo mi palacio? ¡Ya está construido!
[...]
—Y no sigo, señor Dolin. ¿Se da cuenta de que en unos minutos he construido mi palacio y he gozado de él?
—Pero ya se disolvió —dijo, casi con tristeza, el yanqui—. Ya no existe.
—Puedo construir uno más hermoso. Y puedo levantarlo de prisa o despacio, en América o en España. En Asia o en África. En la cumbre más alta o en una isla que apenas asome sobre las olas. Soy dueño y señor del mundo y de sus riquezas. Puedo hacer lo que quiero. Me basta con haber comprado un billete de lotería.
—También puede construir eso sin comprar el billete... —observó Dolin.
—Eso no —protestó César—. Todo juego tiene sus reglas. Sólo Dios puede convertir la nada en cosa tangible y real. Sería un sacrilegio compararse a Dios" José Mallorquí.
¡Felices fiestas, dlt! Un fuerte abrazo
Moderna y Nacional.
ResponderEliminarNo está nada mal como slogan publicitario.
A ver si esta entrada cae en manos de algún creativo de peso y le compra la idea, con lo que la Lotería habría conseguido su propósito de dar un buen Premio.
Saludos.
Esa lotería que hace soñar cada año a miles de españoles, con la esperanza de tener unos cuantos euros más, pasar unas buenas fiestas y quizás salirse de la crisis económica.
ResponderEliminarUn abrazo.
"El Indeseado", por lo que veo, se hacía querer en todos los ámbitos de su España querida. Hasta la diosa Fortuna le otorgaba sus bendiciones, de ahí la famosa frase de "así se las ponían a Fernando VII". Así cualquiera...
ResponderEliminarUn beso y Felices Fiestas
España: pais de pícaros y con estos regentes que nos han caido en gracia demasiado poco...
ResponderEliminarFELIZ NAVIDAD y que la Diosa Fortuna nos deje un pellizquito para ir tirando jeje!.
Un abrazo DLT.
Buenas tardes, DLT.
ResponderEliminarParece que nuestro felón fue más espabilado que Adelson. Si no gana nadie, la banca gana. No obstante, no le echemos toda la culpa a él, que también hubo quien se lo consintió.
Le deseamos lo mejor para el sorteo (si juega) y para el año que entra. Un saludo.
Ya nada nos asombra - en villanías y poco decoro-y eso es mala señal.
ResponderEliminarLe deseo buena suerte, no solo en la lotería también en el año próximo.Y que pase usted en paz y buena companía las fiestas de Navidad.
Un abrazo
Deseo que en esta nochebuena recibas el mejor obsequio de todos: el amor de tus seres queridos.
ResponderEliminarFeliz Navidad...un abrazo
Buen escrito para el final de año, ojalá que el próximo nos traiga suerte, con lotería nacional o sin ella.
ResponderEliminarUn gran abrazo y Felices Fiestas
Ya tenía que haberme imaginado que una idea como la Lotería no tenía más intención que llenar las arcas de la Hacienda. Y después viene el que parecía tonto. Veo que para lo que le convenía.
ResponderEliminarNo es que me guste mucho la Lotería, pero es verdad que anuncia la Navidad. Felices Fiestas.
Tan solo pasar para dejarte mis deseos de felicidad.
ResponderEliminarQue tengas unas felices fiestas junto a los tuyos y que disfrutes.
FELIZ NAVIDAD!
Felices Navidades, querido amigo.
ResponderEliminarDLT, hasra de algo tan familiar como la lotería sacas la historia y la relacionas con Fernando VII. Curioso que le tocara al rey.
ResponderEliminarUn abrazo y felices fiestas.
Gracias por tu buen trabajo en la red, siempre se aprende de ti.
ResponderEliminarPaso a desearte unas felices fiestas navideñas y un mejor Año Nuevo del que ya estamos finalizando.
Un abrazo.
Sor.Cecilia.
Así son algunos reinantes, y aún así los aguantamos...
ResponderEliminarFeliz Navidad, casi tardía y muriente ya, pero no olvido a los amigos.
Yo también paso a desearte una Feliz Navidad y todo lo mejor en este nuevo año que comienza para ti y tus seres queridos. Un abrazo
ResponderEliminarJajajaja, el rey felón era igual que Fabra que siempre le tocaba la lotería. Bueno por aquí no tocó nada , pero lo importante es la salud mas que el dinero. Un abrazo y feliz salida y entrada de año.
ResponderEliminarQuerido Dlt, ¡qué pillín el rey! Con razón el dicho "Así se las ponían a Fernando VII", o mejor aún, se las ponía él solito.
ResponderEliminar¡Felices fiestas, caro amico!
Mil biquiños.